Según la OMS, 24.000 personas mueren de hambre cada día.
Vivimos en tiempos de inestabilidad: pandemias, crisis económicas, desastres climáticos, conflictos militares. Ponen a millones de personas más al borde de la inanición.
¿Estás seguro de que no estarás entre ellos? En una sociedad de consumo, nadie es inmune al hambre hoy en día. ¡Pero eso es absurdo! ¿Por qué es absurdo? Veamos la tecnología que ya existe.
Una de estas tecnologías son las granjas verticales. Tienen enormes ventajas sobre las explotaciones tradicionales:
utilizan un 95% menos de agua y un 80% menos de tierra;
permiten cultivar una gran variedad de productos durante todo el año sin necesidad de utilizar pesticidas;
no dependen del clima ni de la ubicación y tienen bajos costos logísticos;
se pueden cosechar incluso en la Antártida.
Los residuos de pescado fertilizan las plantas, acelerando su crecimiento en un 40%;
es ecológica, prácticamente libre de residuos y no contamina las masas de agua;
no usa pesticidas y utiliza 10 veces menos agua;
una superficie de 1.000 metros cuadrados puede ser tan productiva como 2 hectáreas de campos y 20 hectáreas de estanques;
puede funcionar en el trópico o en el desierto árido. ¡E incluso en la azotea de un rascacielos!
La humanidad ya ha aprendido a imprimir alimentos en 3D, a cultivar pescado y carne de pollo a partir de células. E incluso la alimentación desde el aire ya no es ciencia ficción. Una empresa finlandesa está construyendo una planta para producir harina desde el aire y ha ganado la primera fase de un concurso para abastecer a las misiones espaciales a otros planetas.
Estas son sólo algunas de las tecnologías que existen hoy en día, pero incluso ellas podrían resolver el problema del hambre de una vez por todas. Salvo que estas tecnologías se utilizan ahora generalmente con fines militares y espaciales, a un costo aterradoramente alto. Y el problema del hambre no se ha resuelto; sólo se ha agravado.
El desarrollo y la aplicación de este tipo de tecnologías en las infraestructuras de las ciudades permitirán alimentar a todo el mundo. Hará que el proceso de cultivo de alimentos sea independiente del clima, el tiempo, la ubicación, la fertilidad del suelo o la logística.
En una sociedad de consumo, el hambre es la opción de todos. En una Sociedad Creativa, ninguna persona de ningún país del mundo se acostaría con hambre. En la Sociedad Creativa, nos corresponderá a nosotros, los ciudadanos, decidir juntos qué descubrimientos aplicar primero. Mientras que la apertura y transparencia de la información para todos permitirá un control seguro de la aplicación de nuestras decisiones.
¿No es esta la perspectiva del futuro que sueñas?
Infórmate más sobre el proyecto y únete.
Dejar un comentario
Comentarios (3)
Jorge cano cuellar
27.04.2023 | 05:32Dejar un comentario
Jorge cano Cuellar
27.04.2023 | 05:30Extremadamente interesante!
Dejar un comentario
DAVID DAVALOS
19.10.2022 | 01:23Dejar un comentario
Elen
30.10.2022 | 08:45Dejar un comentario